Tras el cese de actividades de Sol Líneas Aéreas, alrededor de 300 empleados se vieron afectados por la pérdida de empleo. De este modo, los mismos llevan a cabo acampes y protestas en el aeropuerto de Rosario, y también en el de otras provincias.
Los empleados reclaman la presencia de autoridades de la empresa, y también la intervención del gobierno nacional para acercar alguna solución y poder otorgar asistencia para los 300 trabajadores que se quedaron sin trabajo.
Cabe destacar, que mañana en el Ministerio de Trabajo, se reanudará la reunión entre los empleados y los empresarios bajo la supervisión de las autoridades laborales para buscar un consenso entre ambas partes.
«Reclamamos la reincorporación de los 300 trabajadores que tiene la empresa porque aquí no hubo ni pedido de quiebra, ni un cese de actividades justificado”. Pablo Biró, titular de la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas.
