Dos análisis complementarios de la autopsia de Gerardo «Pichón» Escobar recibió la Fiscalía, los cuales indican que no tenía una particular clase de alga que suelen tener las personas que fallecen por ahogamiento.

Asimismo, mediante los resultados se pudo dilucidar que sus pulmones tuvieron modificaciones morfológicas, que son compatibles con un cuadro de asfixia.

En este sentido, confirmaron que el informe que debía establecerse para demostrar si el cadáver tenía diatomea -una clase de alga que está en el río Paraná y que suele tener una persona que murió ahogada-, dio negativo.