A nivel mundial, el principal argumento contrario al desarrollo de Uber es la competencia desleal, que desfavorece a los taxistas, al ofrecer un servicio más barato, más cómodo, con un sistema de pago distinto (en muy pocas localidades se permite el pago con otro medio que no sea el efectivo).  Sin dudas el caso más representativo del conflicto entre el gremio de los taxistas y la empresa es el del España, donde luego de múltiples protestas , se presentaron acciones legales que desembocaron en la prohibición del uso de la aplicación en el territorio español. Estas manifestaciones se replicaron en muchos países, tales como Alemania, Reino Unido, Francia, Costa Rica, Mexico y Tailandia.

A nivel nacional, Uber aún no registra actividad. El Presidente de la Federación Nacional de Peones de Taxis de la República Argentina, Omar Viviani, se mostró reticente al permiso de uso de la aplicación sin legislación o autorizaciones pertinentes. De todas maneras, el servicio comenzó a prestarse provisoriamente en la ciudad de Buenos Aires desde el día 12 de abril, ciudad que va a ser la que sirva de prueba para el desembarco de la aplicación en el resto del país.

En Rosario la polémica no es menor. Tal es así que el tesorero de la Cámara de Titulares de Licencias de Taxis de Rosario, José Iantosca, se manifestó enfáticamente en contrario, al remarcar la falta de controles que tiene la aplicación en su funcionamiento, lo que no ocurre con los taxistas, quienes tienen numerosos requerimientos. También expresó que van a hacer todo lo posible para que la aplicación no sea utilizada en la ciudad. Estos reclamos que se dan desde los gremios, se suman a los que se realizaron con el desembarco de la aplicación Easy Taxi en la ciudad