Nuestra cotidianidad se mantiene atada a situaciones que no esperamos y que derivan muchas veces en echar mano de nuestro dinero. Un imprevisto financiero o un episodio familiar, en el que necesites un ingreso extra, son hechos habituales.

Es ahí donde entra en juego el crédito y nuestra capacidad de endeudamiento para resolver una tarea pendiente en el día a día. El crédito se basa en la confianza, algo que se debe ganar con tiempo. Sin embargo, el mundo va más de prisa y da paso a un nuevo escenario: el crédito online.

Si necesitas dinero rápido, un camino se abre para obtener los fondos, el de préstamos sin recibo de sueldo. Este tipo de préstamos son a corto plazo, sin papeleo y con una característica llamativa, rapidez en su concesión. La principal ventaja, como su propio nombre indica, es que son préstamos sin recibo de sueldo, es decir, que no hay que justificar los ingresos para obtener el dinero.

En estos casos se cuenta con un aliado digital conocido, internet. La solicitud se realiza en línea y una vez aprobada, el dinero es liquidado en cuestión de minutos.

La web hace de puente para el prestamista del dinero. Un prestamista que facilita los procesos y los coloca a un clic de millones de potenciales clientes.

Proceso

El camino para la obtención de fondos se inicia con la cumplimentación de un formulario estándar en el que se solicitan al cliente los datos básicos que servirán para el historial. Cada vez más son las empresas que ofrecen este tipo de servicio a través de la web.

La norma tradicional bancaria estipulaba que un cliente sin recibo de sueldo recibía un ‘no’ como respuesta a su solicitud. Eso a pesar de contar con otras fuentes de ingreso.

Aquí también caían aquellos emprendedores y trabajadores autónomos que vieron cómo se les cierran oportunidades para crecer. Con esta modalidad las oportunidades aumentan exponencialmente, además de ser un método rápido, cómodo y seguro en todos sus niveles.

Los requerimientos son sencillos y son los mismos en casi todos los portales de este tipo: tener 21 años o más, documento de identidad, historial de crédito positivo, cuenta bancaria y el formulario.

Fácil, ¿no? El secreto está en el sistema de evaluación automatizado que procesa todo en poco tiempo. No son necesarias engorrosas carpetas ni visitas continuas a un banco tradicional.

Ya que la naturaleza del producto es resolver un evento sobrevenido y ser pagado en un corto plazo, las cantidades concedidas son relativamente bajas, lo que supone una especie de protección para quien desembolsa los recursos.

Los bancos, en un esfuerzo por involucrarse en este segmento del mercado, han desarrollado productos como los extra créditos si tienes una cuenta nómina, o los créditos extendidos a través de una tarjeta de crédito.

No obstante, en ambos casos se depende de la banca tradicional, tener un sueldo determinado, contar con una tarjeta de este tipo para lograr ser considerado como candidato y, como es sabido, tener con un historial de relaciones limpio con la institución.

Beneficios

Ya hemos planteado algunas de las bondades que brinda esta modalidad de crédito, y aquí va otra no menos importante: las entidades de créditos rápidos online no te solicitarán una justificación sobre el destino de los fondos.

Es decir, puedes hacer el requerimiento y usar los fondos para lo que necesites.

Esto califica a este tipo de operaciones como créditos al consumo, que son otorgados por una empresa financiera para un fin determinado y con una tasa de interés estipulada.

Otro de los aspectos a destacar es que muchos de estos portales te ofrecen la posibilidad de devolver el dinero antes de tiempo. En otras palabras, puedes pagar tu deuda con antelación, lo que te permitirá ahorrar intereses y comisiones.

La disponibilidad para realizar esta solicitud también es de resaltar ya que se puede hacer las 24 horas del día los 365 días del año. Incluso la petición se puede generar desde aplicaciones móviles o s través de una llamada telefónica. Muchos portales también disponen de asesoramiento personalizado online.

Devolución del dinero

Ya solventaste su situación de emergencia y ahora toca devolver el préstamo recibido. Aunque no es una regla escrita, el retorno se realiza en un plazo de 30 días consecutivos. Hay quienes ofrecen extender el plazo otros siete o 15 días según sea el caso.

Este proceso también es sencillo ya que basta con abonar un pago con tarjeta o hacer una transferencia bancaria. Al cumplir con todos estos pasos tu registro crediticio irá mejorando para futuras solicitudes.

También hay que valorar las prórrogas para la cancelación total de la deuda. Esta es una opción que tiene el cliente en caso de que se le presente alguna dificultad para pagar lo adeudado en el plazo establecido.

Esto es lo más recomendable en caso de que el cliente sepa que no logrará cumplir su compromiso, y así no caer en un impago que no vendrá bien a tu historial crediticio.

En estos casos lo crucial es notificarlo ante el departamento de atención al cliente. Esta también será la forma que tendrá el consumidor para dar a conocer la nueva fecha de pago.

Lo menos provechoso de este tipo de solicitudes es que genera un gasto extra por retrasos. El lado positivo para el cliente es que tendrá una mayor tranquilidad ya que su plazo será extendido.

Siempre es recomendable, antes de generar una solicitud, tener claras todas las condiciones para obtener un préstamo. Lo que se traduce en estar al tanto siempre de lo que dice la ‘letra pequeña’ para evitar cualquier sorpresa.