La empresa Rioro decidió cerrar este jueves las puertas de los talleres ferroviarios que tiene a cargo en Pérez. De este modo, alrededor de 70 trabajadores quedaron sin trabajo sorpresivamente.

Sostienen que a partir de 2016, los pedidos para reparación de vagones y locomotoras comenzaron a cortarse ya que ahora realizan la compra de unidades nuevas a China.

Los empleados se encontraron con las puertas cerradas cuando fueron hoy a trabajar y ahora reclaman que se dicte una conciliación obligatoria.